Vegetales asados al horno con salsa de tahini
Esta receta es ideal para aprovechar esos restos de patatas, verduras y todo tipo de vegetales que tenemos en casa y no sabemos qué hacer con ellos. Simplemente basta con asarlos al horno con un poquito de aceite, sal y pimienta. Acompañando estos vegetales con una rica salsa de tahini como la que os propongo hoy tenemos un plato súper fácil de preparar, lleno de colorido, sano y nutritivo. Es un entrante o acompañamiento ideal para muchos platos, como una burger vegana o una ensalada de quinoa. Según la estación podemos ir variando los vegetales y añadir aquellos que sean de temporada.
Recomiendo que los vegetales que utilicemos sean de cultivo ecológico porque así podremos asar las patatas, las zanahorias y demás con su piel.
Ingredientes
Un puñadito de patatas baby variadas.
2 o 3 boniatos medianos.
Unas cuantas zanahorias.
2 o 3 ramas de tomates cherry.
Un par de remolachas.
Un puñado de judías verdes tiernas.
Aceite de oliva picual bio NaturGreen.
Sal rosa del Himalaya fina bio NaturGreen.
Una pizca de pimienta negra.
– Para la salsa de tahini:
5 cucharadas de tahín puré de sésamo bio NaturGreen.
2 cucharadas de sirope de ágave bio NaturGreen.
5 cucharadas de zumo de naranja recién exprimido.
2 cucharadas de vinagre de sidra de manzana bio NaturGreen.
1 cucharadita de pimentón ahumado.
Una pizca de pimienta negra molida.
Una pizca de sal rosa del Himalaya fina bio NaturGreen.
– Para decorar:
Semillas de sésamo crudo bio NaturGreen.
Semillas de cáñamo bio NatuGreen.
Elaboración
Precalentamos el horno a 180 ºC y forramos dos bandejas de horno con papel sulfurizado.
Lavamos muy bien los vegetales y dejamos escurrir un poco. Recomiendo dejar las patatas baby enteras y con piel, lo mismo para las zanahorias si no son muy grandes.
Cortamos en rodajas o cuñas los boniatos y la remolacha, esta última preferiblemente en trozos pequeños ya que es bastante dura y tarda más en hornearse.
Disponemos todos nuestros vegetales bien repartidos entre las dos bandejas que teníamos preparadas y pintamos con aceite de oliva con ayuda de un pincel de cocina. Salpimentamos al gusto y horneamos hasta que los vegetales estén tiernos.
Mientras los vegetales están asándose aprovechamos para preparar la salsa de tahini y así estará lista para poder disfrutar de los vegetales recién salidos del horno.
En un cuenco mediano mezclamos bien con la ayuda de un tenedor todos los ingredientes necesarios, salpimentamos al gusto y probamos. Si queremos que nos quede una salsa menos líquida podemos reducir la cantidad de zumo de naranja.
Servimos los vegetales asados en una fuente o plato grande, espolvoreamos por encima un puñadito de semillas de sésamo y de cáñamo y acompañamos con la salsa de tahini.
Podemos guardar la salsa sobrante en un tarro bien cerrado en el frigorífico durante unos 4 o 5 días aproximadamente.
Receta y fotografías de Gemma, @Cinnamongirlbcn