Receta de gyozas japonesas fáciles y muy sabrosas
Para salir de la rutina hoy os compartimos una receta más exótica, de origen asiático, una delicia japonesa, seguro que muchos las habréis probado alguna vez, las gyozas son una versión japonesa de empanadillas chinas, se diferencian en los ingredientes y su forma de cocción, aunque pueden encontrarse fritas y al vapor, la forma tradicional y más buena de prepararlas es en una sartén dejando dorar la base y terminarlas de cocinar hervidas, esto hace que queden con un sabor más potente. Hoy os enseñaremos a preparar unas con un relleno particular, nada más y nada menos que la combinación de manzana y cerdo! no os imagináis lo buenas que están! así que no dudéis ni un segundo en ir a por los ingredientes.
En general no son ingredientes desconocidos, solo la masa para las empanadillas puede encontrarse en tiendas asiáticas, es un tipo de masa exclusiva para gyozas, hecha solo de harina de trigo y agua, puedes hacerla en casa, pero es mucho más sencillo que las compres hechas.
Ingredientes para preparar gyozas japonesas:
– 300g de cerdo magro picado
– 1 manzana
– Repollo o col rizada
– Cebolleta
– Aceite de sésamo de NaturGreen Alimentación Ecológica
– Tamari de NaturGreen Alimentación Ecológica
– Cebollino
– Semillas de sésamo tostadas de NaturGreen Alimentación Ecológica
– Masas para gyozas
– Jengibre fresco
Opción vegana
Cómo preparar gyozas japonesas:
Lo primero será cortar finamente, la cebolleta, el repollo, y la manzana, una vez los tengamos, los vertemos en un bowl junto con la carne de cerdo, rallamos abundante jengibre (sin miedo a que pique) al estar rallado aportará un sabor dulzón! no hace falta añadir sal ya que luego las mojarás en salsa de soja y será suficiente. Añadir a la mezcla 2 cucharadas de aceite de sésamo, integrar bien y dejar reposar mínimo una hora.
Apenas haya transcurrido el tiempo de macerado, separamos las masitas y comenzamos a armar las empanadillas:
– Coloca una masa en tu mano y coloca en el centro una cucharada de postre de relleno, moja el dedo índice con un poco de agua y humedece el borde de la masita en la parte donde está el relleno para que pueda cerrarse luego (para ello ten cerca un pequeño cuenco con agua).
– Ahora, dóblala por la mitad y con ayuda de un dedo empuja el relleno hacia dentro para que no se salga, presiona una de las esquinas y comienza a hacer los pliegues con un solo lado de la masita y aprieta para ir sellando. Cháfalas un poco por debajo para que queden rectas.
Una vez las tengamos todas listas, en una sartén colocamos aceite de oliva y las sofreímos hasta dorar la parte de abajo, en ese momento añadiremos a la sartén agua caliente hasta cubrirlas por la mitad. Dejaremos la sartén tapada hasta que se haya evaporado toda el agua. Si quieres un toque top extra, cuando el agua se haya evaporado, añade un poco de aceite de sésamo y semillas, saltéalas un poco y servir con salsa de soja. Añade el cebollino cortado por encima.
¡Puedes hacer muchas y congelarlas! Cocinarlas luego es muy rápido y están igual de ricas 🙂
Receta y foto de Alessandra Eminente